Sabemos que el curro puede ser una fuente de estrés: deadlines locos, jefes exigentes y mil cosas que hacer. Aquí te dejamos algunos consejos muy sencillos para que puedas manejar esa presión y no acabes como un flan al final del día.
1. Prioriza y organiza
Vale, esto suena a lo de siempre, pero es que funciona. Hazte una lista de tareas y sé realista con lo que puedes hacer en un día; no te pongas metas de superhéroe. Usar apps como Trello o Asana para no perder la cabeza. Esto te ayuda a ver todo más clarito y a no agobiarte tanto.
2. Aprende a decir no
Si ya estás hasta arriba, está bien rechazar cosas. No tienes por qué cargar con todo. Si te piden algo que no puedes asumir, dilo claramente: «Lo siento, pero ahora mismo tengo demasiado». Y delega, que seguro hay alguien que puede echarte una mano.
3. Respira y relájate
Cuando te sientas super agobiado, tómate un minuto para respirar. Inhala por la nariz, cuenta hasta cuatro, y exhala por la boca despacio. Repite esto unas cuantas veces. Y prueba meditar unos minutos usando apps como Headspace; te ayuda a resetear tu cerebro.
4. Muévete
Estar sentado todo el día es es malo para tu cuerpo y para tu mente. Cada hora, levántate, estira, o da una pequeña vuelta por la oficina. Te ayuda a despertarte y a sentirte menos tenso.
5. Cuida tu espacio de trabajo
Trabajar en un espacio que sientas como propio puede cambiar completamente cómo te sientes. Organízalo a tu gusto, pon cosas que te hagan feliz como plantas, fotos de tus vacaciones o tu figura favorita de acción. Un entorno agradable puede hacer maravillas.
6. Habla claro
Si algo te molesta o no te sientes cómodo con una tarea, es mejor decirlo. La comunicación clara puede evitar muchos problemas y estrés innecesario. Además, pedir feedback regularmente te ayuda a mejorar y a sentirte más seguro de lo que estás haciendo.
7. Desconecta, pero de verdad
Una vez que sales del trabajo, intenta dejar el trabajo en la oficina. No te lleves los problemas a casa. Haz cosas que te gusten y pasa tiempo con tus amigos o familia. Esto te ayuda a recargar y a volver con más energía al día siguiente.
8. Mímate
Tratar bien a tu cuerpo y a tu mente es clave. Intenta dormir tus 8 horas, come cosas que te nutran y no solo chuches y fast food, y muévete. El yoga o el tai chi son perfectos para calmar la mente y fortalecer el cuerpo.
Probar estas cosas no cuesta nada y realmente pueden mejorar tu día a día en el trabajo. Así que, ¿por qué no intentarlo?
Foto de Josefa nDiaz en Unsplash